Dice nuestra lectora y docente, Beatriz:
"Leyendo los comentarios de los distintos corresponsales, coincido particularmente con dos de ellos y que me parecen apropiados para "un tirón de orejas" a distintos grupos:
-el de los padres que, inexplicablemente a lo largo y a lo ancho del país, insisten en el preconcepto de que el turno matutino es mejor que cualquier otro en un liceo, llegando a veces a preferir que su hijo esté en una clase superpoblada de este turno, a que vaya por la tarde o en el vespertino, donde sobran lugares.
Se comprendería el temor por la seguridad en algunas zonas de Montevideo, pero no en todas ni en el resto de los liceos urbanos del interior. ¡Hay que ver la de certificados y justificaciones que presentan, para conseguir que se los considere! O si no, van a hablar "MÁS ARRIBA"...
Felizmente no hemos tenido en este sentido ninguna presión. Las autoridades comprenden claramente que nuestro mayor interés es que los chicos disfruten de una atención verdaderamente personalizada y no interfieren respetando el contexto.
-el de los profes, porque con algunas de sus reivindicaciones, se olvidan de que su única razón de estar son los alumnos. Sin ellos, no hay triángulo didáctico que valga, ni tampoco justificación para cobrar un sueldo por enseñar.
Siempre atenta a Uds. Bea"
Primero están los alumnos y alumnas de secundaria. Así lo vemos los padres y madres que nos acercamos a esta movida. Ayudanos a generar una voz independiente que represente los intereses de los padres y los educandos frente a las instancias de decisión en la Enseñanza Secundaria
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